15 de abril de 2010

Sócrates un poroto

Hay días -por ejemplo, hoy- en los que me encuentro en la cima de la observación crítica del comportamiento humano, y llego a preguntas profundas y relevantes, como estas:

¿Por qué prácticamente todos los colectiveros saludan a -también, prácticamente- todos los policías y guardias de seguridad que se cruzan en el recorrido? ¿Se conocen? En caso de que así sea, ¿de dónde?

No sé a ustedes, mi querido y vasto público, pero a mí estas cosas me sacan el sueño...